Marcar la casilla de la Iglesia en la Declaración de la Renta. Va a ser que no

      Aquí un pequeño vídeo explicativo para darnos un motivo menos, entre otros tantos, para no marcar la casilla correspondiente a la Iglesia Católica en nuestra Declaración de la Renta. En este caso haciendo referencia a cómo se utiliza ese dinero para mantener a flote ciertas cadenas de televisión conocidas por difundir mensajes ultra reaccionarios y de odio, nada que ver con el pretendido discurso de paz, fraternidad y compasión que se le atribuye a la fe católica.



 



 

      Por si esto no parece motivo suficiente ¿Sabíais que más del 80% de lo recaudado a través del citado procedimiento, eso de que los contribuyentes marquen la dichosa casilla, no se destina a fines sociales sino al mantenimiento de parroquias y otras congregaciones? Es decir, a los sueldos y gastos particulares de sacerdotes y otros cargos eclesiales. Y aún más. En caso de marcar la otra casilla en la declaración, la destinada realmente a un fin social, seguimos donando dinero a la Iglesia igualmente. Dado que muchas ONGs están vinculadas a la misma, los administradores finales de todo ese dinero seguirán siendo los obispos y harán con él lo que crean más conveniente a sus intereses. Dada la opacidad de la institución resulta difícil saberlo. Al respecto de todo esto recomiendo este interesantísimo artículo de La Marea, donde se explica más pormenorizadamente lo que se esconde detrás de las campañas de recaudación a favor de la Iglesia. 

 

    Y para concluir un apunte más. Recientemente se ha sabido que RTVE, la televisión pública pagada por todos los ciudadanos del país, se ha negado a retrasmitir o dar una cobertura especial al World Pride 2017, la gran celebración internacional del orgullo LGTB que tendrá lugar este año en Madrid y que atraerá a alrededor de dos millones de visitantes a la capital. Como argumento los responsables de ente público esgrimían que el acontecimiento carece de interés público alguno, añadiendo además que dicha retrasmisión tendría un coste excesivo. No digo yo que los desfiles del orgullo LGTB vayan a tener una audiencia masiva, desde luego ahí pueden tener razón. Pero el caso es que RTVE sí que realizó un despliegue de gran envergadura durante las pasadas festividades de Semana Santa, para así llevar a todos los hogares la retrasmisión en directo de distintos actos religiosos ¿Qué audiencia tuvieron? Pues una media estimada de entre 130.000 a algo menos de 200.000 personas en todo el país, apenas un 2% del share en el mejor de los casos (ver más en Público) ¿Eventos de interés público que merecieron el citado despliegue? Que cada uno lo juzgue como mejor crea. 

 

 

 

Agencia Tigris